
Generación Z: «Mis trabajadores fingen trabajar cuando están en remoto»
Un problema creciente en el teletrabajo
Una empresa ha sacado a la luz un problema que preocupa a muchos empleadores en la era del teletrabajo: algunos empleados de Generación Z están fingiendo trabajar cuando en realidad no lo hacen. El jefe de la empresa, quien prefiere mantener su anonimato, asegura que ha detectado various engaños por parte de sus jóvenes empleados.
¿Cómo engañan los empleados de Generación Z?
- Simulación de actividad: Algunos empleados dejan abiertas las aplicaciones de trabajo para fingir actividad.
- Resumen de tareas falsas: Generan informes o documentos sin contenido real para aparentar productividad.
- Reuniones virtuales teatrales: Participan en reuniones con voz y a la vez haciendo otras tareas personales.
- Bajo rendimiento: Tareas con retrasos y errores indican falta de dedicación real.
Consecuencias de este comportamiento
El jefe de la empresa explica que estas prácticas no solo afectan el rendimiento general de la compañía, sino que también generan un ambiente de desconfianza. «Cuando descubres que algunos empleados no están poniendo el esfuerzo necesario, se crean tensiones y se dificulta el trabajo en equipo«, afirma.
Desafíos para los empleadores
Para los empleadores, esta situación plantea varios desafíos:
- Medición de la productividad: Si la métrica principal es la presencia física o la simulación de actividad, es difícil evaluar la productividad real. Es crucial enfocarse en los resultados y objetivos alcanzados.
- Generación de confianza: La falta de confianza puede llevar a la implementación de herramientas de vigilancia invasivas, lo que a su vez puede generar resentimiento y afectar la moral de los empleados.
- Adaptación cultural: Las empresas necesitan adaptar sus culturas laborales para valorar la eficiencia y la autonomía, en lugar de la apariencia de estar ocupado.
¿Qué se puede hacer?
En lugar de asumir que los trabajadores están «fingiendo», las empresas pueden considerar las siguientes estrategias:
- Establecer expectativas claras: Definir objetivos y resultados medibles para cada rol, independientemente de si el trabajo es remoto o presencial.
- Fomentar la comunicación abierta: Promover un ambiente donde los empleados se sientan cómodos para comunicar sus avances y desafíos.
- Invertir en herramientas adecuadas: Proporcionar las tecnologías necesarias para la colaboración y el seguimiento de proyectos.
- Evaluar por resultados, no por horas: Cambiar el enfoque de la presencia física a la consecución de metas.
- Promover el bienestar: Reconocer que un empleado con buen equilibrio entre vida personal y laboral es, a menudo, un empleado más productivo.
Un reflejo de la realidad laboral actual
Este caso no es aislado. Muchas empresas se están enfrentando a desafíos similares con los empleados más jóvenes, que a menudo tienen expectativas diferentes sobre su rol en la empresa y buscan un equilibrio entre su vida personal y laboral que, en ocasiones, se traduce en prácticas poco profesionales.
¿Te has sentido identificado con esta situación? ¿Crees que el teletrabajo ha cambiado la forma en que los jóvenes abordan su trabajo? Comenta tu experiencia en los comentarios. ¡Tu opnión es importante!