La carne separada mecánicamente y su importancia en la industria alimentaria
La carne separada mecánicamente, conocida como MSC (por sus siglas en inglés), es un producto obtenido a través de un proceso que separa la carne de los huesos y otros tejidos conectivos mediante métodos mecánicos.
¿Cómo se produce la carne separada mecánicamente?
El proceso de separación mecánica implica el uso de altas presiones y técnicas avanzadas para extraer la carne de los huesos. A continuación, se detallan los pasos clave:
- Selección de materias primas: Se utilizan restos de carne y huesos de animales, generalmente de aves o cerdos.
- Proceso de molienda: Los huesos y restos de carne se someten a una molienda intensa para separar la carne de los tejidos duros.
- Separación final: El material resultante se filtra para eliminar cualquier fragmento óseo residual.
Beneficios de la carne separada mecánicamente
La MSC ofrece varias ventajas tanto para la industria como para los consumidores:
- Reducción de costes: La MSC es más económica que la carne tradicional, lo que la hace accesible para productos como salchichas y nuggets.
- Maximización de recursos: Utiliza partes del animal que de otro modo podrían desperdiciarse.
- Versatilidad: Se puede utilizar en una variedad de productos procesados, desde hamburguesas hasta salsas.
Preocupaciones
A pesar de sus ventajas, la MSC ha generado debate debido a:
- Textura y aspecto: La textura suave puede resultar menos atractiva para algunos consumidores.
- Seguridad alimentaria: Existe preocupación por posibles fragmentos de hueso y contenido de calcio.
- Bacterias y hongos: Un solo animal enfermo puede contaminar cientos de kilos de carne. La bacteria E. coli se puede encontrar en la carne picada y puede provocar intoxicaciones alimentarias graves. Al picar la carne, aumenta la superficie susceptible de contaminarse y la capacidad de multiplicarse de las bacterias.
- Etiquetado: La falta de regulación clara sobre su etiquetado ha generado críticas.
Conclusión
La carne separada mecánicamente desempeña un papel crucial en la industria alimentaria al ofrecer una solución económica y sostenible. No obstante, es importante abordar las preocupaciones de salud pública y transparencia para garantizar su aceptación por parte de los consumidores.